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1. Las causas de la Guerra Civil

La Guerra Civil es la mayor catástrofe de la Historia de España. Sus efectos sobre la población y el tejido productivo español fueron brutales. Además de la tragedia humana, la guerra y la posguerra hicieron retroceder a España hacia posiciones muy atrasadas con respecto a su entorno europeo, no sólo en el plano político, sino también en el económico, social y cultural. Aún hoy, la guerra civil aparece como una sombra en la conciencia de los españoles. La reflexión sobre ella ocupa un papel muy importante en nuestra cultura y su utilización política sigue siendo una permanente tentación.

Cartel del PCE
Cartel del PCE en 1938, en el que se conmemoran los principales hitos en la lucha por la victoria del republicanismo. (autor: Josep Renau)
Imagen del Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía. Uso con fines educativos.

Por ello es muy importante intentar entender cómo fue posible que se desatara una tragedia como esta. La causa profunda fue la radicalización de la vida política española en el duro contexto económico de la depresión de los años 30. En especial hay que destacar el enfrentamiento de la extrema derecha española con la República y su defensa de una solución antidemocrática. La derecha radical defendía una solución autoritaria, es decir, una dictadura militar. La Falange y otros grupos próximos al fascismo defendían una alternativa totalitaria, es decir, la dictadura ejercida por un partido único con la voluntad de lograr, no sólo la obediencia, sino también la adhesión activa de todos los españoles. A ello se sumaba el tradicional intervencionismo del ejército en la vida política española, que desde Miguel Primo de Rivera muchos militares consideraban la encarnación de los máximos valores nacionales y el salvador de una Patria supuestamente amenazada por los partidos políticos.

Pero esta causa profunda no significaba que la guerra fuera inevitable, ni que fuera inevitable la duración y el grado de violencia que alcanzó. De hecho, la guerra no estalló en el momento preciso en que más violenta era la lucha política, además de que existía una parte importante de la población española que era ajena a esta lucha. La guerra necesitó de una causa directa, y esta fue la conspiración organizada por una Junta Militar, presidida desde el exilio por Sanjurjo y formada por generales como Mola, Franco, Goded y Fanjul. Esta trama militar fue apoyada por una trama civil, formada por la derecha radical monárquica, falangistas y carlistas, que prepararon sus milicias de partido para apoyar el levantamiento. El asesinato de Calvo Sotelo el 13 de julio proporcionó a la Junta Militar la ocasión propicia para efectuar el levantamiento. En definitiva, la guerra fue provocada por un nuevo golpe de Estado militar.