4.3.2. Arte nazarí

b) Arte nazarí: la Alhambra y el Generalife

El Reino Nazarí de Granada (siglos XIII-XV) representa el ocaso de al-Ándalus. Sin embargo, su cultura y su arte no son simplemente un último eco de un esplendor pasado, sino que representan un magnífico canto del cisne de la civilización andalusí.

Su arquitectura se caracteriza por los siguientes rasgos:

• el retorno al refinamiento de la época califal tras la sobriedad del período almohade;
• el barroquismo (o sea, el carácter ostentoso y recargado) en sus decoraciones, que tienden a cubrir todos los muros y en las que destaca el uso del mocárabe;
• el empleo de materiales modestos como el tapial, que son dignificados gracias al recubrimiento de magníficas yeserías;
• la integración de arquitectura y paisaje.

Sin duda, la principal obra de la arquitectura nazarí es la Alhambra, que fue el centro del poder nazarí.

La Alhambra de Granada, centro del poder nazarí. Imagen de Charlie Jackson en Flickr. Licencia CC BY.

La Alhambra (que significa la Roja) es una ciudadela fortificada, construida por los reyes nazaríes como sede de su poder en Granada, que era la capital de su reino. La Alhambra une en un mismo complejo arquitectónico las funciones de:

• ciudad palatina, urbanizada con calles estrechas y serpenteantes;
• alcazaba o fortaleza;
• y residencia real, constituida por los palacios nazaríes más los magníficos jardines y huertos del Partal y el Generalife, caracterizados por la abundancia de agua.

  Mapa de la Alhambra Pulsa en la imagen para verla más grande

Podemos distinguir varias fases en la construcción del conjunto.

1) La fundación de la Alhambra data del siglo XIII, de tiempos del primer emir nazarí, Muhammad I (1238-1273). Este había iniciado su reinado en la actual provincia de Jaén, pero en 1238 convirtió Granada en la capital de su reino. Muhammad I eligió como lugar de residencia y fortaleza el cerro de la Sabika, un lugar elevado y bien protegido, tanto frente a invasores como frente a posibles disturbios en la ciudad. Cuando él llegó solo había allí unas pocas construcciones defensivas. Muhammad I construyó la alcazaba  y estableció las infraestructuras hidráulicas que permitieron abastecer el cerro de abundante agua, traída desde zonas más elevadas (concretamente la cabecera del río Darro, un afluente del Genil) y almacenada en cisternas.

2) A finales del XIII Muhammad II (1273-1302) hizo construir en un cerro vecino del de la Alhambra el palacio del Generalife, un pabellón de recreo para el verano, dotado de patios con jardines y fuentes y rodeado de bancales de huertas y una amplia dehesa.

Palacio del Generalife

3) A comienzos del XIV Muhammad III (1302-1309) dotó a la ciudad palatina de infraestructuras importantes, como la mezquita (en cuyo solar los cristianos levantaron una iglesia) y unos baños públicos. Además incorporó la cultura del agua y la jardinería a la propia Alhambra, construyendo el palacio del Partal. En él se estableció un modelo con gran éxito en la arquitectura nazarí, el palacio que preside una alberca en la que se refleja su imagen.

Palacio del Partal

4) En el segundo tercio del siglo XIV, bajo Yusuf I (1333-1354), comienza la época de máximo esplendor de la Alhambra. Cristaliza ahora el doble carácter militar y residencial de la Alhambra, destacando el contraste entre la sobriedad de los exteriores y la suntuosidad de los interiores, así como la interrelación entre edificio y paisaje. Yusuf I construyó nuevas torres y puertas en el recinto amurallado. Pero sobre todo comenzó la construcción del palacio de Comares. En él destaca la Torre de Comares, en cuyo interior está la impresionante qubba (salón cuadrado techado con cúpula) que alberga el salón del trono. Destacan sus yeserías y el artesonado del techo, en el que se representan los siete cielos del Paraíso. Con la torre de Comares se repitió el modelo de situar el palacio ante una alberca (patio de los Arrayanes).

Salón del Trono en la Torre de Comares

Patio de los Arrayanes

5) En la segunda mitad del siglo XIV, bajo Muhammad V (1354-1391), culmina el período de maximo esplendor de la Alhambra. Muhammad V concluyó el palacio de Comares, pero se hizo construir una nueva residencia palatina junto a él. Es el palacio de los Leones. El palacio se organiza en torno al patio de los Leones, un patio de crucero en torno a una fuente reutilizada, dotada de doce leones. A él se abren cuatro espléndidas dependencias: la Sala de Mocárabes, la Sala de los Reyes, la Sala de los Abencerrajes y la Sala de las Dos Hermanas. El espléndido mirador de Lindaraja permitía disfrutar de una gran panorámica sobre Granada, que sin embargo construcciones posteriores han eliminado. Muhammad V también realizó otras construcciones importantes como la nueva sala de audiencias o Mexuar.

Patio de los leones Imagen de Tuxyso en Wikimedia Commons. Licencia CC.

Cúpula de mocárabes en la Sala de los Abencerrajes

La alianza de Muhammad V con Pedro I de Castilla le llevó a enviar artistas granadinos a los Reales Alcázares de Sevilla, convirtiéndose el arte nazarí en un elemento de influencia sobre el arte mudéjar.